Gastón López se suma a seguridad, como Jefe de Policía Comunal. Compartimos nota del 2013

 

Gastón López fue relevado de su cargo cuando el Jefe de la Policía Comunal era Juan Carlos Agüero y el Intendente Anibal Pittelli.

 

A fines de marzo del 2013, al tener en cuenta su trabajo, el impacto que había causado en la gente y en nosotros como medio de comunicación, porque veíamos que la historia se repetía, decidimos entrevistar al Sub Comisario Gastón López, el Policía que había logrado hacer que la gente confiara en el y que el poder político se lo arrebataba. Ese mismo poder político pero en manos de otro Intendente, es el que lo convoca a trabajar.

 

-¿Cuándo y cómo llega a Chivilcoy?

-En febrero de 2012 llegué a Chivilcoy. Yo venía de desempeñarme como titular en Moquehuá, donde había tenido una buena campaña. Fui promovido por quien en ese entonces era el Secretario de Seguridad, Santiago Bertone que me trajo para desempeñarme como titular de la Estación de Policía Comunal. Fue un desafío porque no tenía ni la jerarquía ni la experiencia suficiente para desempeñar semejante función. En lo que es nuestro trabajo, ser comisario, ser titular de una dependencia es una enorme responsabilidad. Sin embargo, lo asumí como un desafío, como todos los destinos que me tocaron.

 

-¿Cómo planteó la relación con la gente un titular de la delegación de Chivilcoy?

-Le tomé la mano rápidamente. Me di cuenta que tenía que ir comprendiendo la necesidad de la gente. Hay una policía que a veces no escucha y yo sentí que ellos necesitaban ser escuchados y trabajé para que la gente sea escuchada. Presté mi oído, no dudé en dar mi teléfono celular porque me parecía que era una forma de contener a un damnificado que por un hecho está dolido.

 

-¿Qué balance hace de este año trabajando en ésta ciudad?

-Afortunadamente el balance es bueno. Me llevo muchas alegrías, reconocimientos que me dan fuerzas para empezar otro período.

 

-¿Cómo se entera del traslado y cómo repercutió en usted?

-Fue durante la semana pasada que me enteré de la decisión que tenía tomada el Comisario Inspector Agüero de sacarme de la Jurisdicción. Está dentro de sus funciones elegir los efectivos con los cuales quiere trabajar. Uno este tipo de decisiones las puede compartir o no pero sí la respeto. Son inherentes a las funciones del Comisario Inspector Agüero y por lo tanto la respeto. Seguiré trabajando donde la superioridad policial lo disponga. Me hubiese gustado que viendo el expediente iniciado el 4 de marzo poder haber tenido conocimiento previo para ir vislumbrando mi futuro, pero ante la imposibilidad, no es para hacer un drama. Es una actitud que tal vez yo no hubiese tenido. Lo acepto como es.

 

-¿Qué siente que le quedó por hacer en Chivilcoy?

-Me hubiese gustado manejar de otra forma algunas cosas si hubiese dependido sólo de mí. Con las figuras policiales nuevas, muchas veces las opiniones chocan y prevalecen las de mayor jerarquía. Es una carrera verticalista y lamentablemente es así y hay que adaptarse. Me voy muy satisfecho, me voy con el respaldo del personal, de muchos efectivos que fueron trasladados y me llamaron para solidarizarse. Con los oficiales de servicio en una excelente relación. Creo que con casi todos me voy muy bien. Esto es así, ya va a pasar.

 

-¿Agradecimientos?

-Sí, quiero ser justo y agradecer a toda la gente que me bancó en todo este tiempo. A mi familia en primer lugar que muchas veces hemos pospuesto viajes o cambiar siempre cosas por mi servicio y siempre me apoyaron. Al personal que trabajó y me correspondió va todo mi reconocimiento y agradecimiento. A Santiago Bertone que fue como mi mentor en la policía comunal. Al Juez de Paz, Eduardo Banchero un reconocimiento enorme y muy agradecido por sus palabras. A Guillermo Britos que fue quien más cosas me enseñó en la Policía, quien mientras estuve en Moquehuá fue un palenque en el cual me respaldé y recibí apoyo continuamente porque al ser el de allá conocía y siempre pude contar con el.

 

-¿Sorprendió la gente que lo llamó ante la noticia del traslado?

Yo agradezco muchísimo a la gente común que confió en mi. A muchos que llamaron a la Comisaría para brindar unas palabras y me sorprendió gratamente y fue inesperado. Que me llamen para decirme que no me vaya, hasta me chocaba porque no esperé ese gesto y no depende de mí tampoco. Traté de llegarle a toda la gente de bien y a quien debo responder. No me interesa tener relación con la delincuencia para nada, pero si para la gente de bien que fue para lo que trabajé. Espero haber cumplido y esperar que nos depara el destino y quizás próximamente volvamos a compartir el lugar.